Antes de adentrarte en el mundo del flamenco, debes tener en cuenta los zapatos perfectos para que tu experiencia sea perfecta. Los zapatos de baile son posiblemente el elemento y la parte más importante para un bailaor y una bailaora de flamenco. Un buen calzado de baile se caracteriza por la calidad de sus materiales y por la sonoridad que produce.

Actualmente existen numerosos materiales para tus zapatos, pero para que un zapato sea de buena calidad, se aconseja que el zapato que te compres sea un calzado de producción española, y que esté compuesto por materiales de piel o de ante natural. 

CUESTIONES SOBRE LOS ZAPATOS A TENER EN CUENTA

  • Cuando empiezas a bailar flamenco, lo más adecuado es un zapato llamado “de ensayo básico con tachuelas”. 
  • Asegúrate de que el material sea piel o ante. El material es muy importante para evitar sufrir las temidas rozaduras y heridas que provocan los zapatos de plástico, polipiel o piel sintética. Además, estos últimos también causan una sudoración excesiva y generalmente, malos olores.

El precio

Este tema es lo primero en lo que pensamos a la hora de adquirir un producto nuevo. En este aspecto, debes ser inteligente a la hora de comprar tu zapato, porque probablemente, por una baja diferencia de precio, puedes tener un zapato mucho más cómo, más duradero y funcional. 

Los pies, como los ojos o las manos, son una parte del cuerpo más, y no por ello requieren menor cantidad de mimos. No hay nada más incómodo que bailar con unos zapatos que hacen daño. 

¡No lo permitas!

Los clavos

Un aspecto importante y del que se habla bastante poco es el de los clavos del zapato de flamenco. Los clavos son aquel elemento que le dan la sonoridad a tu baile. Por ello, cuanto más golpees el suelo, si no es un clavo adecuado, no vas a obtener la sonoridad que buscas. 

Como consejo, te recomendamos que acudas a una zapatería o a un especialista para que coloque tus clavos, ya que sabrán de primera mano cómo hacerlo sin dañar al zapato.

¿Correa o elástico?

Todos hemos dudado en este punto. Lo más aconsejable siempre será la correa, ya que asegura mayor sujeción al pie que el elástico, y así podrás evitar gran cantidad de lesiones. 

Pero, por otro lado, el elástico es una alternativa bastante más económica si estás empezando.